¿Qué es la democracia?
La democracia es un sistema político en el cual el poder reside en el pueblo, quienes participan de manera directa o a través de representantes elegidos, en la toma de decisiones que afectan la comunidad o la sociedad en su conjunto. Es un sistema que se fundamenta en varios principios básicos:

EVOLUCIÓN
La democracia ha evolucionado desde sus raíces en la antigua Grecia hasta convertirse en una forma predominante de gobierno en gran parte del mundo moderno. Su historia refleja una constante lucha por los derechos y la participación popular, así como adaptaciones a los desafíos y cambios sociales a lo largo de los siglos..
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES

Los principios fundamentales de la democracia son los pilares sobre los cuales se construye este sistema de gobierno que busca garantizar la participación, la justicia y la libertad para todos los ciudadanos. .
Soberanía popular: En democracia, el poder reside en el pueblo. Los ciudadanos tienen el derecho y la capacidad de elegir a sus representantes a través de elecciones libres y justas. Además, participan en la toma de decisiones políticas mediante mecanismos como el voto y la participación en procesos políticos.
Estado de derecho: La democracia implica el respeto y la protección de los derechos individuales y colectivos de todos los ciudadanos. Esto se logra a través de la existencia de un marco legal claro y aplicable a todos por igual, incluyendo a las autoridades y al gobierno mismo.
Separación de poderes: Para evitar la concentración de poder y garantizar el control mutuo entre las diferentes ramas del gobierno, la democracia establece la separación de poderes en tres principales: el poder legislativo, el poder ejecutivo y el poder judicial. Cada uno de estos poderes tiene sus funciones y responsabilidades específicas, y se controla mutuamente para evitar el abuso de poder.
Elecciones libres y justas: Las elecciones son un componente fundamental de la democracia representativa. Deben ser libres, lo que significa que los ciudadanos pueden ejercer su voto sin coacción ni influencia indebida, y justas, lo que garantiza que todos los votos cuenten por igual y se respete la voluntad popular expresada en las urnas.